Aunque en toda la Sierra de Gredos existen numerosos circos glaciares (zonas de acumulación de hielo en la cabecera de éstos) es el Circo de la Laguna de la Nava el más característico, por su forma redondeada.
Comenzamos nuestro camino ascendiendo por el valle, el primer tramos transcurre bajo la sombra de la vegetación, hasta llegar al dominio del matorral. Continuamos la subida acompañados por el sonido del agua.
En el tramo alto, la garganta está más encajada y la senda transcurre por un camino empedrado, las rocas aborregadas que observamos junto al camino dan testimonio de la erosión del hielo. Es el dominio de la roca.
Culminamos la ascensión con la vista prometida del Circo de la Laguna de la Nava, un anfiteatro de roca que se levanta ante nosotros para custodiar la laguna.